Para profundizar nuestro hermanamiento y cariño mutuo, qué mejor que enseñarles esta imagen. Como todos los chilangos han estado en Garibaldi, y han disfrutado de su animado ambiente, ya no tienen excusas para visitar la siempre concurrida (y con restos de meadas de borrachos por todas partes) Plaça Reial de Barcelona. Así podrán comparar, pero ante todo disfrutar del ambiente del centro de la ciudad condal. Sin mariachis, pero con lateros. Sin taxis timadores, pero con guiris tocacojones. ¿Se apuntan?

1 comentari:
que buena onda! así cuando vaya no extrañaré esa plaza llena de peculiaridades que es garibaldi. Pero dime una cosa, habrá un tropicana por allá? que quiero seducirte con mis bailes! jaja
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